martes, 9 de septiembre de 2008

Whitesnake Good to be bad 2008.( y el misterioso trance baracaldés)



Viajé hasta La Coruña para ver a esta versión 2008 de Whitesnake.Acompañado de mi buen amigo Pali Jaldón. Ciertamente me asaltaba la duda de como estaría mi idolatrado David Coverdale. Había leido alguna crítica de los conciertos que dias antes, esta nueva formación había ofrecido en Baracaldo. Las críticas venían a decir, poco más o menos que se estaba haciendo playback y que el cantante poco más que se dedicaba a pavonearse por el escenario utilizando el micro como una extensión de su pene.
Que vergüenza que haya tipos que van a los conciertos por la cara para hacer una crítica totalmente destructiva y falsa. Por no hablar de las invenciones que pude encontrar en algunos foritos.
Lo de un indocumentado ganapan,llamado Oscar Cubillo, que escribe en el correo digital , es para morirse:

El seductor Coverdale, todo el rato despechugado, la faz ajada pero aún con atractivo teniendo en cuenta que anda por los 57 aunque aparenta algunos más, más la melena rubia bien cuidada, en la primera canción (una nueva, ‘Best Years’, tipo The Cult) hizo lo que mejor le sale y lo que ahora practica por fuerza de la naturaleza. Lo que mejor le sale es dar la nota sexy (?) y usar el pie del micro como una prolongación fálica que a veces acompaña con golpetazos de cadera. Y lo ahora hace por obligación es esconderse, tanto, que nos olimos una farsa nada más empezar: ¡esa primera canción parecía playback! Coverdale mantenía alejado el micro y se oía bien... pero concederemos que el organista en especial y todos en general le hacían los deberes al jefe de la banda, quien en hora y tres cuartos (saludos finales incluidos) se escondió casi todo el rato, permitiendo que el respetable coreara prolongadamente (“haced un poco más de puto ruido”, llegó a exigir al final), cubriéndose las espaldas con sus gregarios (hasta cuatro micrófonos útiles había, sin contar con el del baterista) y utilizando trucos mágicos que conferían eco, sostenidos y potencia a su garganta. Si quereis seguir leyendo estupideces os dejo el enlace y la foto del seductor Oscar o tal vez se llama OsKar...


http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/ocio/gps/musica/250708/cubillo-concierto-whitesnake.html

Y que decir de las invenciones que tienen que ver con la parafernalia y el lado vicioso del rock...

Aquí podeis leer lo que se inventan en un foro para hacerse gloria del narrador y el implicado en un incidente del mismo concierto. Yo no sé si es que en esa sala aquella noche todo el mundo entro en un agujero espacio-temporal. Tal vez al ser un garito pequeño todos entraron en un trance extraño.
anecdota:
en un tema dió una ostia con el micro a javi granja que staba en el foso haciendo fotos y tras pedirle perdón le regaló su vaso de whisky.
(Qué bien, esa ostia no la olvidará en su vida). Pero, pero que tonterías hay que inventarse para dar interés a un forito. Qúe desinformación. David Coverdale ya no hace desgastes innecesarios. Si siguiera con el ritmo de vida que llevaba en los 80 cuando bebía whisky con naranja y fumaba malboro 100, seguramente estaría en un geriatrico.




Menos mal que no es este el caso de todo el mundo. En una entrevista que se realizó antes de este último tour. Un periodista formula una pregunta que es de todo punto esclarecedor a la vez que nos revela ciertos cambios en el modo de enfocar una gira con profesionalidad.
Escuché por Internet algunos temas de la gira y tu voz está realmente espectacular, estás cantando mejor que nunca con una fuerza impresionante… ¿cuidas tu voz de alguna manera especial?

DC: Bueno, me alegro que se note que aún puedo cantar (risas). Lo cierto es que en los 80’s todos éramos más jóvenes y cometíamos muchos excesos con el alcohol y las drogas, bueno como rockero tu sabes a lo que me refiero. Pasábamos en fiestas y además yo fumaba mucho, entonces todo eso era muy malo para la voz. Hoy nos cuidamos mucho cuando andamos de gira, comemos muy sano, (David es vegetariano), no fumo, no bebo alcohol, hago mucho ejercicio, yoga y relajación y trato de dormir lo suficiente para estar fresco y energético para los shows, y creo que todos esos cuidados y preparación se notan porque estamos montando un verdadero infierno rockero cada vez que salimos a tocar.





Y efectivamente es lo que pudimos ver y escuchar. Un concierto con una calidad excelente. El recinto con una acústica buena, el público participativo y correcto en todo momento, el sonido buenísimo, se escuchaba todo (los solos de los dos guitarristas al mismo volumen) a un volumen muy potente y sin pérdida de fidelidad. Todo. Un concierto en el que aprendes a saber lo que deben ofrecerte en un espectáculo de estas características y que sirve de modelo para evaluar futuros eventos.


Así fue. La duda después de ver la energía y la capacidad de ofrecer un lujo en directo es ¿Realmente es el último? Si es así, gracias Whitesnake. Nunca te olvidaremos.